Categorías
Declaradas Patrimonio de la Humanidad por UNESCO en 1989, esta belleza de la naturaleza está situada entre la frontera de Zimbabue y Zambia. En 1855 el mítico escocés D. Livigstone descubrió las cataratas y las bautizó con el nombre de la reina Victoria, siendo su nombre original Mosi-oa-Tunya que significa «humo que truena» y cuando estás frente a ellas entiendes el significado. Forma junto a las cataratas del Niágara y las cataratas del Iguazú el podio de saltos de agua del mundo.
Las cataratas Victoria constituyen un salto de agua del río Zambeze, sitio idóneo para los amantes de la aventura y el rafting ya que es considerado el rafting comercial más peligroso del mundo, sin contar con que por sus aguas podemos encontrar algún que otro cocodrilo. Desde el antiguo puente de acero en forma de arco que se encuentra sobre las cataratas también se puede practicar «puenting».
Formada por una caída en picado en una sola vertical de, aproximadamente, 108m de alto y 1.7 km de ancho. Su caudal varía en función de la estación, lluviosa desde finales de noviembre hasta principios de abril y seca el resto del año, la época más seca es septiembre/enero y en esos meses se puede observar la primera garganta en casi toda su longitud.
Mención especial la Piscina del Diablo, en la época seca cuando los niveles de agua son bajos se puede vivir una de las experiencias más increíbles, darse un chapuzón al borde de las cataratas en una piscina natural a la que se accede a través de la isla Linvigstone (Zambia). Sobrevolar esta maravilla de la naturaleza, es también toda una experiencia, ya sea en helicóptero o en ultra ligero, sin duda alguna obtendremos una de esas fotos para guardar en la retina.
Impresionante, verdad? Tú también puedes disfrutar de esta maravilla de la naturaleza. Anímate!